La Alfalfa
pertenece a la familia de las Leguminosas (Leguminosae); el nombre del género
(Medicago) se refiere a una antigua ciudad de África , mientras que el nombre
de la especie (Sativa) hace referencia a ser cultivable. Es una de esas plantas
en donde el 90% de las personas que la conocen le llaman de la misma manera,
Alfalfa; es difícil entonces que si se pregunta por la Alfalfa se haga
referencia a una planta distinta a la Medicago sativa.
La Alfalfa
es un vegetal sumamente nutritivo, por ello ha sido utilizado ampliamente como
forraje durante siglos; contiene más proteínas que la mayor parte de los
vegetales y cuenta con una cantidad importante de vitaminas y minerales. La
alfalfa es una fuente de estrógenos naturales (fitoestrógenos).
Se le
atribuye a la gran profundidad que llega a alcanzar su raíz la cantidad de
minerales y vitaminas que contiene al lograr obtener del subsuelo todos estos
minerales difícilmente alcanzables para la mayoría de las plantas. La Alfalfa
aporta todas las vitaminas conocidas.
Es una
maravillosa fuente de vitaminas. Muy eficaz en los casos de hemorragia, por su
alto contenido en vitamina K natural, en las dolencias inflamatorias como la
artritis. Tiene una poderosa acción desintoxicante, siendo una gran depurativa,
más aún que la levadura de cerveza y el germen de trigo.
Con acción
diurética, conviene en los problemas renales. Por su elevado contenido en
vitamina D natural, calcio y fósforo orgánicos, resulta beneficiosa para los
huesos y dientes, muy útil en el embarazo y después de la menopausia para
evitar la descalcificación y la osteoporosis.
Contiene
enzimas básicas para el correcto funcionamiento de nuestro cuerpo, como por
ejemplo proteasa, invertasa, y lipasa, que le confieren actividad reductora de
las grasas en sangre, de ahí que sea útil para la arteriosclerosis, también
repara el tejido conjuntivo, remineraliza, en muy rica en sílice, contiene más
vitamina D y A que los aceites de pescado y un gran número de oligoelementos.
Muy eficaz
en los dolores de estómago y en las úlceras sangrantes, corrige los gases,
ayuda en la digestión y soluciona la falta de apetito (pero no aumenta el
apetito en personas que no estén inapetentes). Muy interesante en los casos de
anemia y cuando hay desarreglos con la menstruación o la falta de ella.
Todas las
embarazadas deberían tomarla durante el embarazo y la lactancia para evitar
deficiencias en minerales y vitaminas. Muy buena en los problemas hepáticos y
en el acné. Contiene las hormonas femeninas llamadas estrógenos, por lo que es
aconsejable en la menopausia, en los desarreglos con la menstruación y en los
problemas de ovarios.
Actúa sobre
la hipófisis, bloqueando la secreción de hormona luteinizante, por lo que
servirá para reducir la transformación de testosterona en aldosterona, en los
casos de adenoma de próstata. Se puede tomar fresca en las ensaladas o hervida
o en forma de cápsulas.
Hace algunos
años estudiantes crearon una galleta “medicinal” con alfalfa, avena y alpiste
capaz de ayudar a regular la presión arterial, purificar el sistema
circulatorio y reducir los niveles de colesterol; ojalá este tipo de productos
se vendieran masivamente para beneficio de casi todos.
Uso principal: Antianémica,reductor de los niveles de
colesterol y glucosa.
Nombres comunes: Mielga.
Otros usos: Arterosclerosis, inmunoestimulante, detiene
las hemorragias, estrogénico, anemia, diurético, favorece el proceso digestivo,
desintoxicante hepático, vasodilatador, várices, flebitis, hemorroides, artritis,
artrosis, cáncer de colon, osteoporosis, menopausia, ayuda a la producción de
leche materna, dispepsia, úlceras, anticonceptivo.
Tradicionalmente
para reducir los niveles de colesterol se toman de 5 a 10g en té tres veces al
día. Su consumo moderado como alimento ayuda a fortalecer las uñas y a mejorar
la apariencia del cabello.
Investigación: Se han efectuado
diversos estudios tanto en humanos como en animales, que muestran que la
Alfalfa reduce los niveles de colesterol. El contenido de sustancias
nutricionales de la Alfalfa ha sido ampliamente estudiado, no así sus
propiedades medicinales, por ello es muy recomendada como forraje. El efecto
estrogénico ha sido demostrado en diversos animales.
Toxicidad: Baja. Consumir como alimento grandes cantidades
de alfalfa puede producir algunos de los efectos del estrógeno, provocar daños
en los glóbulos rojos y puede disminuir el efecto de las pastillas
anticonceptivas. Puede resultar abortiva.
Tiempo de recolección: Primavera-verano.
Localización: Es originaria de Asia Menor y de la cuenca
Mediterránea. Se encuentra cultivada y naturalizada en la mayoría de las
regiones templadas del mundo.
Otros usos: Forraje, fertilizante natural.
Descripción: Es una planta perenne, erecta, muy
ramificada, con los tallos cubiertos de pelillos blancos, y que alcanza hasta
1m de altura; hojas trifoliadas con foliolos obovados, dentados en la punta;
las flores agrupadas en inflorescencias de tipo racimo, son de color púrpura o
amarilla; el fruto es una pequeña legumbre enrollada en forma de caracol, mide
de 4 a 8 mm de diámetro de color oscuro. Sus raíces suelen alcanzar hasta los
4m. Es una planta que dura varios años y renace después de cortarla.
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